Apoyo emocional en tiempos de Coronavirus

En  situaciones como ésta, en las que surgen alertas como las de la OMS que nos indica que nos encontramos ante una pandemia global, resulta complejo manejar el equilibrio entre el estar atentos a la información que se va actualizando, con el hecho de no caer en pánico.

Nos encontramos todavía a tiempo para evitar un escenario peor. Y si bien necesitamos mantenernos informados y seguir las indicaciones que nos piden para cuidarnos entre todos, también es urgente el poder protegernos  y cuidarnos emocionalmente en estos momentos.

Estas ideas pueden ser de ayuda en lo referente a lo emocional y tienen como foco el cuidar aquello que pensamos y sentimos, en relación a lo cual hay distintas acciones que podemos tomar. Algunas de las que hemos trabajado con mis pacientes (que ahora atiendo por videollamada) y que han funcionado son las siguientes:

• Es muy importante buscar información de fuentes confiables y contrastar los datos que nos llegan: no todo lo que se dice es cierto. Suena obvio pero ante una situación de pánico puede resultar fácil sacar el “filtro”de racionalizar lo que está pasando e ir directamente a la emoción sin regulación y en ese sentido es importante detenerse y reflexionar ante cada mensaje que nos llegue: mejor calidad que cantidad.

• También es relevante dosificar el tiempo que permanecemos leyendo y la cantidad de información a la que accedemos, ya que si bien es necesario mantenerse al tanto, también lo es cuidarse. Es importante para nuestra mente y  cuerpo no permanecer en estado de alerta constante.

• Es necesario poder mantenerse ocupado/a con otras actividades o quehaceres, si bien hay muchos que trabajarán desde sus casas, es de ayuda el incorporar alguna actividad de recreación como cocinar, pintar, leer, escribir o  ver una película.

• Observar los propios pensamientos y detenerse: puede ser muy útil el ir viendo y revisando qué estamos pensando, nuestras creencias de lo que ocurre tiñen y recrean el cómo vemos la realidad.

• Mantener las rutinas, es importante el despertarse, vestirse, ducharse y alimentarse.

• Solicitar ayuda emocional si sientes que el tema te sobrepasa. Algunos síntomas a tomar en cuenta es si estás teniendo dificultades para dormir (conciliar el sueño, desvelarte o despertar muy temprano), si tu alimentación es distinta, si tu ánimo no es el usual (corrobora con otras personas que te conocen) o  si estás sintiendo cambios en tu motivación.

¿Se te ocurren otras acciones? ¿Qué estás haciendo para cuidarte en estos momentos?